Excursionismo, escalada en roca, ascensiones en alta montaña, escalada de cascadas de hielo, esquí de montaña, diferentes actividades que hacen de las montañas un paraíso donde encontrar las sensaciones más enriquecedoras y excitantes. Un terreno de juego grandioso e inagotable para todos, desde aquél que sólo pretende un tranquilo paseo, hasta el himalayista.
Pero la grandeza del medio montañoso tiene también sus inconvenientes. Las montañas están vivas y siguen su imperceptible ciclo orogénico, creciendo, desmoronándose, siendo erosionadas. Las fuerzas de la naturaleza son infinitamente poderosas e incontrolables, cualquier ser humano allí no es más que un diminuto grano de arena en el desierto y altamente vulnerable. Afortunadamente para nosotros disponemos del bagaje de conocimiento, observación y estudio que nuestros predecesores han ido acumulando con sus experiencias para poder predecir o sospechar cuándo o dónde se producirán las consecuencias derivadas de estos procesos naturales y por tanto tratar de evitar encontrarnos en su camino.