La ciencia ha identificado en el cannabis diversos principios activos potencialmente beneficiosos para
sobrellevar el tratamiento de enfermedades tan dolorosas como el cáncer, el SIDA o la esclerosis múltiple. Sin embargo, el cáñamo es una planta cultivada desde hace tres mil años y muchas civilizaciones antiguas conocían ya sus propiedades
terapéuticas y la consideraron por ello una "planta de los dioses".