La radiocirugía ilustra como pocas especialidades la evolución/revolución que ha vivido la Medicina desde los últimos años del siglo xx hasta nuestros días. De la aspiración inicial de sus creadores de 'operar sin operar' al momento actual -en el que la radiocirugía se ha consolidado como un procedimiento capaz de transformar las metástasis cerebrales en entidades controlables y no mortales de los pacientes con cáncer, o tratar malformaciones arteriovenosas con un mínimo riesgo hemorrágico- y encarando el futuro como una herramienta para el abordaje de la patología funcional (tal vez para alteraciones del comportamiento), la radiocirugía es una aportación transversal a la medicina moderna. Además, la radiocirugía es un ejemplo de disciplina multiautor, inviable fuera de un contexto de trabajo en equipo esmerado. Este texto se presenta como un reflejo de esa evolución/revolución médica, en la que el concepto de 'enfermos' en plural cambia a 'paciente' singular (medicina personalizada) y el protagonismo de 'el médico' cede el relevo al equipo multidisciplinar, trabajando conjuntamente en beneficio de la person