"Dioses, cielos, cerros, nos, hombres y animales, sagrados y profanos, pueblan las páginas de este manuscrito conservado en la Biblioteca Nacional de Madrid, al que José María Arguedas tradujo del quechua al castellano entre diciembre de 1965 y junio de 1966, titulándolo Dioses y hombres de Huarochirí; el único texto quechua de origen popular que, desde los siglos XVI y XVII, nos ofrece una visión completa y, como decía Arguedas, coherente, de la mitología, los ritos y la sociedad de una provincia del Perú